viernes, 9 de enero de 2009

Escapando del pasado

Muchas veces queremos olvidar nuestro pasado, nos alejamos de el como si fuera un estorbo, pero este se niega a dejarnos escapar.

Con esto solo se demuestra que cada paso que damos nos acompañará, con mucha suerte, por una eternidad. Así las cosas, es mejor dar los pasos correctos para evitar luego tener que recordarlo por siempre como malos momentos.

Me ha quedado demostrado que a la par de situaciones confusas y poco entrañables, siempre hay una luz sujetada generalmente a una persona, que hace que las cosas hayan valido la pena, aunque no se quieran recordar.

3 comentarios:

Lidia M. Domes dijo...

Es mejor tomar el pasado así, tal como fue, darle un lugar...

Pues si queremos escapar de él consigue asomarse en cuanto nos distraemos aunque sea un poco...

Abrazos,

Lidia

Anónimo dijo...

Hola Haz, aunque el pasado no traiga siempre recuerdos que me merezca la pena recordar, agradezco por ellos, porque gracias a tales acciones, personas o situaciones, es que ahora vivo este presente que tanto disfruto!

Un besito grande Haz de Luz!!

González Luis dijo...

De los errores del pasado aprende el hombre inteligente. De lo contrario seguirá haciéndolos y perjudicándose a sí mismo.
Errar significa tomar conciencia. Progresar, ser más cuidadoso en la próxima vez. Es madurar.

El pasado existe. Lo retomamos en nuestro pensamiento, a veces lo rumeamos y lo volvemos digerir. Mucho es desechado, pero como los nutrientes, también dan vida a nuestro presente.
Mi vida se ilumina hoy, gracias al pasado compartido con tu luz!