martes, 14 de octubre de 2008

Las escojas son oportunidades en globos de colores

Las oportunidades viajan solas, amarradas en globos de colores y tienen disntintas dimensiones. Algunas vuelan alto, muy alto, pero otras están al alcance de nuestras manos materiales.

Tu tarea es reconocerlas y para ello, tenés que trabajar tu ojo invisible para ver las cosas invisibles. Si las intentás ver con los ojos con que ves a tu perro o tu bicicleta, probablemente fracasarás en el intento de lograr colocar tu mano en uno de esos globos de colores.

Para entrenar tu ojo invisible tenés que entenderlo primero y eso no se hace tan fácilmente. Tenés que creer en él, para empezar. Tenés que estar completamente libre de ataduras sociales que solo te han hecho creer que la verdad está en lo que ves y no en lo que sentís. Una vez dado este primer paso, podrás creer en tu ojo invisible y en la capacidad que tiene este de ver lo que no has visto nunca.

Pero lo que no has visto nunca no se parece en nada a lo que conocés y es ahí, el punto culminante de tu estado de verdad, pues es ahí...donde decidís seguir con tu mirada actual o tu mirada nueva. Si decidís no creer, no confiar...eliminás entonces ese vínculo con un mundo más real que este mismo en el que estás, porque se te hará de fantasía.

Pero si decidís creer, ese mundo de fantasía logrará hacerte caminar por el mundo con una nueva visión y entenderás que la fantasía no es realmente fantasía, sino verdad.

Verás los globos de colores que llevan las oportunidades por el mundo, volando, flotando en frente de tus ojos, esperando solamente que alargues tus manos (que no son manos) y las tomés, según el color que prefirás.

Una vez que te decidís por un globo, encontrarás que éste, está completamente ligado a un color específicamente preparado para vos y es ahí, en donde encontrarás una clave más. Estás atado a un color.

Poco a poco empezarás a reconocer los colores que serán más fáciles para vos alcanzar y los otros, los dejarás pasar, llevando consigo las oportunidades que total, son para otros y no para vos. A esta acción, le llamaremos escoja.

Las escojas son todas buenas y siempre lo serán; pero algunas te llevarán a tu meta concreta por caminos más ligeros que otros, pero otras veces, los caminos serán ásperos, bruscos, que te enseñarán a reconocer las escojas que más certeras para vos. Mientras transitás esos caminos escarpados, rocosos, difíciles, no tendrás más opción que reconocer tu error y entregarte todo, completo a la verdad que has empezado a reconocer y dejarte en sus manos. Ella te llevará al inicio del camino y sabrás entonces que has debido equivocar tu escoja. La próxima vez, será más sencillo, ya lo verás.

Gracias Dios, por dejar un vínculo entre vos y yo.

2 comentarios:

Lidia M. Domes dijo...

Si, con cada error aprendemos algo...

Cariños,

Lidia

González Luis dijo...

CAsi me desubico con el título, pero entendí el texto. Debo crear mi ojo invisible, creí en tercera dimensión con mis ojos humanos podría econtrar 1 de esos globos.

Pero creo que debo luchar aún más. Me parece muy interesante....
- Te dejé tarea...!