martes, 8 de mayo de 2007

Técnicas de relajamiento

Veamos la manera de relajar el cuerpo, los beneficios que eso nos da y su importancia para la práctica de las técnicas de proyección astral y de meditación, que serán vistas próximamente.

Estudios en el campo de la psicología revelaron que una persona que practica regularmente alguna técnica de relajamiento, tiene la posibilidad de evitar enfermedades causadas por estrés, de poder trabajar mejor la ansiedad, de tener un mejor relacionamiento interpersonal, etc.

Cuando practicamos el relajamiento nuestro objetivo es “olvidarnos” de nuestro cuerpo, es decir, dejarlo tan relajado y sin tensiones de tal manera que sería como si no estuviera allí, como que en aquel momento no tuviéramos cuerpo físico.

Además de los beneficios para la salud que ya vimos, el relajamiento será la primera etapa de las técnicas que aprenderemos para la proyección astral y la meditación. Por eso empiece desde ya a practicar la técnica de relajamiento, para irse acostumbrando. Si es posible practique por lo menos una vez al día en el horario que le convenga mejor. Cuanto más practique mejor.

La técnica para hacer el relajamiento es muy simple y al mismo tiempo muy eficaz y la llamamos de “Técnica de la luz azul”.

Para practicarla usaremos nuestra concentración e imaginación combinadas:
  1. Primero debemos acostarnos en una posición confortable lo suficiente para no tener que movernos más, escogiendo un lugar silencioso, tranquilo y bien ventilado. Normalmente la habitación donde dormimos es la ideal.
  2. Ahora cerremos los ojos, concentrémonos y vamos a imaginar, o sea, visualizar con la mente, todo nuestro cuerpo que está en la cama, empezando de los pies a la cabeza.
  3. Después vamos a empezar a imaginar una luz celeste llenando nuestro cuerpo, comenzando por los dedos de los pies, continuando por todo el pie, el tobillo, las pantorrillas, así sucesivamente hasta el topo de la cabeza. No imagine apenas esa luz cubriendo su cuerpo, pero imagine también que ella llena su cuerpo como si él fuera hueco.
  4. Haga la etapa anterior sin prisa e imaginando de la mejor forma posible todo ese proceso, sintiendo relajar cada músculo por donde pasa la luz azul.
  5. Al final de la práctica el cuerpo deberá estar totalmente cubierto por la luz azul, así como también totalmente relajado.

Si cree que es necesario repita todas las etapas nuevamente.

Puede ser que usted tenga alguna dificultad en concentrarse y en mantener la imagen en la mente. Eso es reflejo de nuestra falta de concentración. Con la práctica eso irá mejorando y además, más adelante trataremos exclusivamente el tema de la concentración y cómo desenvolverla.

Tomado de Divina Ciencia

1 comentario:

Viviana dijo...

Muy bueno esto, la relajación es tan importante para no actuar por impulso, todos deberíamos tenerlo en cuenta. Gracias por el aporte Haz. Bien tu Luz.
Besos,
Viviana